장음표시 사용
31쪽
nientes a los tres primeros sigios. Pag. I. Felix , por los anos 2 O. Pag. is. Pedro , por los anos 3 6. Pag.
Prudencio. Desde et fin delsigio IV. hasta entrado et
Disertacion de Ia patria de Prudencio. 92. M morias particulares de lasIglesias , MuZsrabes, Liter tos , y Reyes de ZaragoZaen los quatro sigios de sucaut vidad. IO9. Prefacio sobre Ia Coleccion de Sentencias trahajada por elce lebre Obispo de ZaragoZaTajon. I 2ω Epistola Taionis Episcopi Cae- Saraugustani ad Eugenium Episcopum Toletanum. I 66. Tajonis Caesaraugustani Episcopi Sententiarum libri U. Praefatio ad Quiricum Barcinonensem Antistitem, &c.
Quirici Episcopi Responsio ad Taionem Episcopum. I72. Sententiarum Liber I. I 78.
32쪽
T RATA DO LXVILDE ALGUNOS VARONES ILUSTRES
CESARAUGUSTANOS. MEMORIAS LITTRARIAS CON RNTENT
cedente , puede justamente gloriarse, de que en ningun tiem PQ participo la barbarie de los pucblos antiguos de ripana; antes bien decie su mismo ori-gen logro la dicha de recibir et Punio mas alto de Ia cultura, civilidad, y erudicion, que los
Romanos introdugeron en num-tras Provincias. Contribuyerona ilustraria con este adorno Suumacion, las nobies calidades de in Fundador, la epoca de suerecclon , y las primeras gen- Tom. XXXI. res que la habItaron. La simacion sue en ta Edetania, R gion apacible y sertit, que per tenecta a la Provincia Tarrac neme, cuyos puebios por lascostas, y la parte mediterraneaeran de los mas civilirados porei continuo, y largo comercio con los Romanos. Su Fundadorsue Octavio Augusto, que de de su primera edad se lacio noy aplico a las tetras, en que salio tan aprovechado, que Suingenio, erudicion , y escritos
nos que et Imperio , y la gran- dega de sus hechos. Prot lotamblen a Ios rabios, y pr movio Ias clancias distribuyendo grandes premios, y erig em
33쪽
quales propiedades nos persuaden , que comunicaria largamente este bien a Cesaraugusta, obra tan de su agrado , que lasublimo con tolos los honoresa que se extendiA su poder. Et Ilampo en que se fiando, Re elmismo en que los Romanos fi Teclaron mas en todo genero de civilidad y cultura. Las gentes que la habitaron primero, heron de las familias mas itus- tres de Roma, como se testificacon las que delaron sus nom-hres en las Medallas, que aquise balteron: de donde se coligeque sus primeros colonos fue-ton literatos, pues lodos Iosnobles de aquei tiempo se en-tregaban at estudio de las tetras.
Las prerrosativas de Colonia y
Convento iuridico pedian tam-hien necesariamente, que Se ese tablectesen en ella gentes egercitatas a lo menos en et Arte
con los preciosos esmalles, queacompanaban esta lacultad enet sigio de Augusto. Mi que
totas las circunstancias que se notan en los principios de ZaragoZa nos obligan a creer queella fite desde su ereccion una de las cludades mas civiliZadas,
Y Drectentes en las Artes, queilustraban la Republica de Ios
cionando la gran variacion quese advertia en su edad en Ias
Regiones de Espasia quanto hmodales y costumbres, ta propone como uno de los mem-plos mas Sefialados en que se veta una viva imagen de la curutura , y civilidas det Imperio
Romano. Et qua num condYa sunt urbes, Pax Augusta in Ce tua , Augusta Enrerata in Turdulis , ct Cesaraugusta apud Celtiberos aliaque nonnulla C Ionia demonstrant mutarimem
r Estas felicidades en querespIandecio en su principiola Colonia Cesaraugustana deben reconocerse por esectos muy particulares de la Providencia Divina, que como nore en Otra parte, quiso que porestos medios se preparasen los animos de sus habitadores , Y de Ias Regiones vecinas Para cibir y penetrar mejor la do trina det Santo Evangelio, que
34쪽
Monti ilustres Cesaraugustanos.
me est tantis successibus atque triumphis Romani Imperii: Christo jam tunc venienti, Crede, parata Dia est, quam dudum publica nostrae Pacis amicitia struxit moderamine Roma.' Setenta anos poco mas bmenos despues de su sundacion
Jesu-Christo , siendo una delas primeras cludades que reci-bieron este singular Y celestialbeneficio. Y si alendemos a ladisposicion que semn lo dicho lenian los animos de los Cesaraugustanos para hacerSe capaces de la doctrina de Christo, ya Ia anticipacion con que se lesanuncio et Santo Evangello, ya las noticias que como originarios de Roma tenesian de los Progresos, que Se advertian enios Romanos, cuya devocion
Maestros y Doctores que lo-graron: no podremos menos de consesar, que Ios fietes de estalalesia aprovecharon grande- mente en et conocimiento e inteligencia de los sagrados doν mas; y que entre ellos for claron en los primeros sigiosmuchos sugetos ricos de rapi- 'tim y de rubiduria. No ignoro, que eSte m do de pensar no es conserme aciertos criticos severos , que
i han pretendido con todos sus
mente los felices progresos delas Iglesias de nuestra Espanaen los tres sigios primer Entre ellos debe ser contado pri cipalmente Cayetano Cenni, en cuya obra intitulada, De antiquitate Eeelesiae Hispa , se hallan muchas clausulas dirigIdas a disminula excesivamenteel adelantamiento , que Otros insignes Eruditos reconocieronen los primeros Christianos deestas Provincias. Et mismo moviro su poca estimacion a cercadet parecer det Cardens Baronio, que afirmo haber sidomuy florectente la Iglesia de ripana avn en et tiempo de Neron, cuyo Imperio fite muypocos anos despues de la promulgacion det Evangelio. Noignoro pues, qtie mi dbscurrio
es contrario a este, y a otros criticos que siguen Su Sentencia; pero tengo por clerio quequando no iuvieramos otro
emplo que la Ulesia de Zaragora, ella sola basiaba paramanifestar la falsedad de loque ellos quieren enablacer: lo
35쪽
ques afirmo con tanto mayor no conceders a vina de un tes- confianZa , quanto me consta timonio tan expreSO y abonado,
con evidencia que no trahen que los progresos que iuvo latan firmes testimonios en prue- Religion Christiana en estaha de sus opiniones como los Ciudad, desde que en ella seque tenemos en nuestro favor. predico et Evangelio , sue onY omittendo otros hasta repro- grandes, y admirabies ' Y asiduciis et que nos delo para ho mismo i quien negari que senor si tre de esia Iglesia et cele- deduce legitimamente haber flo-bre y antiquisimo Poeta Chris- recido en esta Ulesia en los trestiano Aurelio Prudencio, at ques primeros Siglos, ilustres, y s
mirano mucho no attendan en bios Varones, a cuya celestialeste munio, b para segula como semilla correspondiesen tan ex-
deben su autoridad grande en celentes V abundantes frutos de materia de antig tedades Chris- heroica se y santidad 'tianas; h a lo menos para satis- s Yo 1 lo menos reflexi facer, si pueden, at argumen- nando sobre et aumento de estato eficacisimo que se sorma de Iglesia hasta la persecueson m Sus palabras. Dice mes, que Vida por los Emperadores Dio decie que los enem os dei cleciano y Maximiano, en quenombre de Christo comenZaron padecieron tantos Martyres qu a pers uir a los que seguian la se les da justamente et titulo de Religion Christiana , emplea- Inumerabies, estoy persuadidoron su ira y rabia especial- que si pudieramos particularimente contra la Iglesia de Zara- tiar lo que se comprehende erisOZa, de manera que no exci- lo que hemos dicho , hallaria-taron persecueson alguna desde mos no solo muchos Santos doelos primeros liempos, en que quienes solo tenemos rata notino egercitasen su crueidad ma- cia generat, sino tambien mutando aqiii un largo numero de Chos varones ilustres por suFieses. Dice rambien que ran doctriha, cuya memoria ennOleios estuvleron de extinguir et blectese a nuestra Espana, asi Christianismo por medio de las como sertiligaron a Zarago Perincuciones , como preten- con los admirabies frutos de sudian, que en cada una de ellas ensenanra. Pero la distancia de
36쪽
K; Ones ilustres Cesaraugasianos. s
tan est abies noticus, y fi- cero. Pocas son las noticias iii naimente la malignidad de los dividuales, que tenemos de clienemigos de la - lesia , nos pero sin embargo es uno de los han privado de esta gloru en sugetos mas conocidos en Iatanto grado , que avn Pruden- Historia Eclesiastica por habercio habiendo sita tan cercano sido de merito tan sobresalienae,1 estos liempos no pudo darnos que et gran Doctor y θlorioso esta noticia sino con voces ge- Mastyr Cypricino te dei6 alta-nerales consor me a la tradicion mente alabado en sus escritos. que paraba de unos en otros. 7 Hacese tan honorifica Por tanto contentandome con mencion de rate ilustre Cesarau. haber escrito esta memoria det gustano , por et Zelo con quemodo que et nos la ha delata desendio la antigua disciplina enen sus obras, ta ques basta pa- Ia celebre causa de Basilides vra convencer 1 los que ponen Marciat, et primero Obispo desu conato en deprimir los pro- Αstorga , y et segundo de Me-gresos de nuestra Iglesia en los rida. Habiendo estos Prelados Primeros sigios, tratare parti- incurrido en los gravisimos decularmente , mr lo que loca a litos , que se refieren en ellos tres primeros, de uno cuya Tom. I 3. de esta Obra , pag. memoria ha quedado perpetua- I33. fueron depuratos de sus da para honor singular de Za- Sedes por voto de los obisposragoZa , y para egemplo de que presidian en las Iglesias co-donde congeturemos et cultivo marcanas, y por et testimonio de las ciencias ingradas en es- y consentimiento de los fieses ta Ulesia. de Astorga , Leon y Merida, substitvvendo en su iugar los
FELIX. mismos Deponentes 1 otros dos. - llamados Sabino, y Felix. Basi- por los an9S 2Fo. lides, que por algunos dias se
habIa empleado en obras de po6 La ignorancia que piae- nitencia para satisfaccion de loscemos acerca de los Varones itus- enormes pecados, que es mi tres que en los primeros sigios mo conseso, y por los quales Produgeron en ta Iglesia de Za- se recon Io ind:gno det Obi ragora tos admirabies efectos. pado conforme Λ los Canonesque hemos dicho, nos prccisa de algunos Concilios que se ce-λ dar la primacia a Felix, que lebraron cerca de vi tiempo, florecto at medio dei sigio ter- sue tan poco perseVerante en lo
37쪽
comen Zado, que se resolvio nosolo a no vivir en et estado larucat a que euaba reducido, sinoa pretender con todo su eSfuer-Zo su antigua dignidad. Coneste fin se partio a Roma, ypresentandose at Pontifice Esteban, te hiZo relacion de loque en su Iglesia se habia ege-cutado contra el; pero disimulo y encubrio los delitos que lehicieron dignisimo de aquel
castigo. Como et Santo Papa ignoraba enteramente et hecho
de las Iglesias de Espana, y los motivos de aquella deposicionjustifima, dio credito a los dichos de Basilides: y de aquiresulto que este mal Obispo i grase un Decreto real mente
obrepticio, para que asi Et como Marciat suesen restitutdos asus Sillas. 8 Este caso turbo grande- mente las Iglesias de Astorga, Leon, y Merida ue pues avnque podian estis alentata por haberobservado puniual mente la di ciplina Eclesiastica en ta expulsion de Ios Obispos, no de aronde temer a vista de un Rescrip to dimanado de la Cathedra deSan Pedro, a quieri veneraban
ficultad de este negocio las obibgo a consultar at Santo Obismortaginense Cypriano, Oriculo de aquei clempo, eSperando que in respuesta las daria oel auxilio b et consueto, que susolicitud buscaba en su trabalo. Eligieron pol sus legados 1 los dos Obispos substitutdos Sabino , y Felix , para que est
llevasen las tetras en vive exponian la serie de lodo et sucem,
ast en Io relativo a la deposi-cion, como en to que miraba alrecurso de Basilides, y al Decreto det Pontifice Romano.
No contentos con esto, Solicitaron carta de Felix de Zarago-Za, que siendo et unico que escribio en esta ocasion fitera delas partes que miraban la causa como propria, se infiere queera Sugeto muy insigne enimios que florecian entonces en Espana. Presentadas las cartas, 'convoco Sari Cypriano los Obispos de Africa, para leemias en publico Concilio. La de Felix agrado tanto 1 los Padres, que respondiendo et Santo Obispo de Cartago en non brede lodos ellos a las Iglesias referidas, te honro con los elogios singulares de Propagadorde lari , F Defensor de la Ue dad. Por donde parece que Sucarta se dirigio no solo a insor- mar acerca dei hecho , sino iambien 1 manisestar, que Basilides, y Marciat no debian re
38쪽
Varones ilustres Cesaraugustanos. 7
Vlesia. Por tanto no se plrede dudar que este celebre Uaron lae en este tiempo uno de losque et Santo Doctor Cypriano propum a las Iglesias afligidas
como egemplos de la constancia en defensa de la Fe Catholica, y de Ias sanias costumbres de la Iglesia contra es escindatoque causaban otros Eelesiastiacos , que no dudaron , comodice et Santo, quebrantar lasanta y celestiat disciplina , y
ς Et Patie Boschlo contranuador de Bolando trata de lacausa de los Obispos depuestos en Espasia , en et Tom. I. des' mes de Agosto at dia 2. y pretendiendo vindicar San rite-ban de la obrepcion que te atribuye San Cypriano , Opone ciertos reparos , los quales si concluyeran lo que pretenden, osuscarian sin duda la gloria denuestro Felix , y la de su Pane- rista 3 y mostrarian que lasIglesias de Espana eran mas dignas de reprehension que delas insignes alabanZas, que me' recieron de los Padres Africanos por la rigida ' observandia
de la Disciplina Eclesiastica. Et glorioso Pontifice y Martir Sanriteban no perdio por la obren-cion algima parte dei honor deque me dignisimo: porque como dice es mismo Boschio , clmas diligente , y cauto puededar credito a una falsa narracion , singularmente quando abunda de aquella cuidad queno imagina et mal, y lo creerodo; y de aquella misericordia que se emplea mas en sevorde los reos que de los Actores. Pero 1 la verdad Ios reparos deicitado Escritor se dirigen amostrar que la integridad y veracidad de Felix, y de Iosobispos substitutdos por Su --rito en iugar de los depuestos, y final mente de los Eclesiast cos y fietes de las Iglesias referbdas era tan sospectiosa como lade Basilides; y demss de estoque los Espanoles dichos y San Cypriano ignoraban o que brantaban la Disciplina que de-bia observarse; aquellos, deponiendo los Obispos sin ta consulta necesaria, y San Cypriano aprobando la deposiclon he-cha de este modo injusto. Portanto no puedo menos de satisfacer a sus reparos, y Vindicaria gloria, que ran iustamente se merecieron de los Obispos de Africa nuestras Iglesias, yel insigne varon de quien tra
ro Vindicando pues, et re- strido erudito a San Esteban, liciga 1 sospectiar, que San Cypriano incursio , at escribir sucarta a las Iglesias de Espana, en
39쪽
cer en ta causa que se te consultaba , sin haber oldo 1 laparte contraria, y guiado de larelacion que te hicieron los queeran interesados en este nego-
esta suerte: i Por ventura eranestos idoneos testigos en una causa tan propria ' i Por ventura nopodian ellos en nar a San priano 'ualmente que Basilides a San Esteban is Es clario, que yo no de Otra manera que es Padre Bos-chio ignoro la ultima sentencia,con que se termino esta causa;
pero siendo preciso que iuZγemos Sobre este punio segun los documentos que tenemos presentes, debo advertis que et zelo de este ricritor por la gloria de San Esteban no procedes un Ia discrecion Y moderacion debida. i. n podri su- mr que se sospeche de la integri lad y condicion de los de-Ponentes ante San Cypriano, ylos demis Obispos de Africa
ualmente que dei deponente ante S. Esteban De solo Basilides consta que fite a Roma, Fque insorino at Papa a cerca desu deposicion ; y habiendo este cometido todas aquellas culpasque es mismo conseso , hayhan motivo para creer Io queescribe San Cypriano : esto es, que a los delitos anteriores an dii, et de Ia salacia con la ambi-cion de volver at Obi spado deque habia sido justamente eX-
pelido. Hoc eo pertinet , Basilidis non tam abolita sint, quam cumulata delidia , ut ad superiora peccata ejus etiam fa
Iaciae , circumυemtionis erimen accesserit. Mas tas de Mnem
tes en et Concilio doAfrica iudiron no solo los Obispos substitutdos en iugar de Basilides, YMarciat, sino tambien los talesiasticos y demsi fietes de A torga , Leon y Μerida , de
quienes sin raZon alguna pr tende Boschio, que no erantestigos idoneos; pues smun ladisciplina que se obserVaba, uellos solos locaba el dar testia monio de sus Obispos, Por i ner mas persecto conocimiento
de su Vida , y acciones; y d m si de esto no hay et mas leve motivo para juZgar que los m Vio su propria paston, y no laintegridad de su se , y et temorde Dios, como creyo San Cypriano: Pro fidei vestrae integritate , di pro Dei timore fecistis. Justifica tam bien ta verdia conque estos depusteron , et hechode Felix Cesaraugustano, queescribto a los Obispos de Africa
conviniendo enteramente en larelacion de las causas, Por que
40쪽
Varones ilustres cesaraugustanos. '
Marcies: det quai Felix i quien Marciat, no se letali CanoneSpodrs asegurar que depuso se- de algun Concilio , ni Decre-gun lo que te dictaba su proprio tos Pontificios , por donde
aiecto, y no semn lo que te ins- constase que se debia consultarPiraban aquellas grandes virtu- a la Sede Romana antes de lie
deeste celebre varon, y de tantos tes. La costumbre era, que los fietes como eran los de aquellas que presidian en las Sedes mas Vimias, en comparacion de so- cercanas , y soliari concurririo Basilides de quien no sa - con et puebio a la eleccion, ymos Otra cosa que los graves consagracion det Obispo de delitos, que te constituyeron alguna Iglesia, concurrian delandigno det Obispado. mismo modo 1 oir las acusaci
Ia omne iambien et cita- nes que se hacian contra et Pre- do Escritor , que la deposicion lado: y si ratas se reconsciande Basilides y Marciat no me le- justificadas, paraban a la degitima, porque debio preceder posicion det Obispo, y a lael recurso at Romano Pontim substitucion de otro en su dig- 9 y esta omision basiaba pa- nidad, sin que se hiciese antes ra que et Papa S. Esteban resti- recurso a la Sede Romana, νt ese a sus Sedes , a lo menos hastando et voto de los Obispos, hasta nuevo examen de la cau- y et testimonio de los fietes. Es--, illos obispos deputatos. te modo de proceder se tenta 13 Si este reparo fuera ἀ- entonces por tan legitimo y tu 1ido se demostraria sin duda, to, que escribiendo San Cy-que los Obispos e Iglesias de Es- priano a las Iglesias de Eispana, pana ignoraban este punio de las consueta en su afliccion, di- Disciplina, y asi mismo San CP ciendo, que acerca de lo que priano y nuestro Felix , que preguntaban en aquei caso, noaprobaron aquella deposicion tanto respondia et con su dic- como hecha con todos los re- tamen, quanto tos preceptos de quisitos necesarios. Pero te ha- Dios , que mandaban, se hicidillo tan mal fundado, que rere, se lo mismo que ellas habianno mucho lo hara opuesto un hecho ; y que la eleccion, yhombre tan erudito como Bos- consagracion de los obis schio. Por los mos en que se hb Sabino y Felix era muy conser-